He deseado no sentir la necesidad de tener a uno de vosotros entre mis dedos, he sentido repugna por necesitaros en mis labios.
Pese a ello... os he echado en falta.
Hoy me ha faltado algo en la tasca, entre la sangría y las cañas.
Y me he reprimido.
Pero aún y así... hoy me ha faltado ese sabor amargo en la boca y ese olor ceniciento en mis manos.
Una llama junto a mi cara, sentir que su luz brilla en mis ojos, y después... relajación.
Hoy he querido aplastaros contra el fondo de un cenicero, y olvidarme de cuanto me rodea... hoy no he podido si quiera acercarme a vosotros.
Y pese a ello...
[...hoy he tenido pensamientos indeseables... un cigarro... una tasca... hoy os he necesitado de nuevo y he prescindido de vosotros...]

No hay comentarios:
Publicar un comentario