11 de diciembre de 2007

Esto es vida... esto es muerte.


Desde el momento en que nacemos, empezamos a morir lenta pero irremediablemente.

Cada bocanada de aire oxigena nuestra sangre, cosa que hace que nuestras células vayan envejeciendo a un ritmo irrefrenable.

El mismo aire que nos da la vida... nos mata.

Y es que cada día no es un día más, es un día menos de nuestra simbólica estancia en este mundo.

No es catastrofismo, ni tampoco pesimismo lo que fluye por mis venas, si no admiración por la belleza y complejidad de nuestras vidas... y muertes.

Siendo así, no puedo evitar pensar que vale más la pena buscar la felicidad durante este camino, que anfrascarse en árduas y extensas empresas con el único fin de alcanzar el éxito.

Porque yo quiero una vida plena y feliz, y no una muerte pomposa y solitaria en espíritu.

1 comentario:

Mcaif dijo...

Entonces aprovecha cada bocanada de aire que cojas para estar cerca de los que te hacen feliz ^^ no querras que te hagan "perder vida". Ahora que empiezas a ser feliz aprovecha los momentos que puedas Carlita.

PD: Me alegro por lo que te esta pasando ^^ besos cielo!